La Laguna de las Madres (Huelva) avanza hacia su renacimiento verde

La Junta de Andalucía y la Fundación Moeve impulsarán una restauración ambiental integral en el entorno de la Laguna de las Madres, uno de los humedales de mayor valor ecológico de la provincia de Huelva, tras la firma de un Protocolo General de Actuación que permitirá desarrollar proyectos de recuperación en este enclave situado entre Moguer y Palos de la Frontera.

La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Catalina García, y la directora de la Fundación Moeve, Teresa Mañueco, formalizaron este acuerdo que abre la puerta a una colaboración estable para promover intervenciones destinadas a mejorar el estado ecológico de la laguna, reforzar su conservación y fomentar su conocimiento social.

Según destacó la Junta, se trata de un paso decisivo para garantizar la protección activa de un espacio incluido en la Red Natura 2000, declarado Zona Especial de Conservación (ZEC) en 2025 e inscrito en la Lista Ramsar de humedales de importancia internacional.

Un humedal singular con una biodiversidad excepcional

La Laguna de las Madres mantiene unas sesenta hectáreas de superficie inundada de forma permanente. Esta retención hídrica sostenida durante todo el año favorece la presencia de numerosas especies de aves acuáticas reproductoras y poblaciones de mamíferos tan relevantes como la nutria, además de la presencia ocasional de lince ibérico en su entorno inmediato.

El enclave forma parte del paraje natural Lagunas de Palos y las Madres, un conjunto que supera las 700 hectáreas junto a otras láminas de agua cercanas como la Laguna Primera de Palos, La Jara o La Mujer. Su singularidad paisajística, su función ecológica y su papel como refugio de fauna justifican la necesidad de establecer medidas de conservación reforzadas.

La presión de usos agrícolas e industriales, las alteraciones hidrológicas históricas y la fragilidad inherente a los ecosistemas de humedad hacen que la planificación conjunta sea fundamental para garantizar su buen estado ecológico a medio y largo plazo. El protocolo firmado responde precisamente a esta necesidad, proporcionando un marco de trabajo compartido entre la administración ambiental y una entidad con larga trayectoria en proyectos de renaturalización.

Restauración, educación ambiental y ciencia aplicada

El acuerdo sienta las bases para una cooperación amplia que incluirá labores de regeneración del entorno, adecuación ambiental, mejora de hábitats, estudios científico-técnicos y acciones de sensibilización dirigidas a la ciudadanía.

Además, establece líneas de trabajo prioritarias y mecanismos de coordinación entre ambas instituciones, que deberán concretarse en futuros convenios específicos para cada actuación.

Estos permitirán articular intervenciones basadas en soluciones naturales, promover el intercambio de información, coordinar equipos técnicos y facilitar la participación de agentes sociales en actividades educativas y divulgativas.

La consejera Catalina García subrayó que el acuerdo “reafirma el compromiso de la Junta de Andalucía con la protección de los humedales onubenses, esenciales para la biodiversidad y la adaptación al cambio climático”. Añadió que la alianza “sumará capacidades y conocimiento para impulsar proyectos que cuidarán un enclave tan valioso como la Laguna de las Madres, reforzando su papel en el equilibrio ecológico de la comarca”.

Veinticinco años de experiencia en restauración de humedales

Por su parte, Teresa Mañueco recordó que la Fundación Moeve lleva más de dos décadas trabajando en la recuperación de ecosistemas hídricos. “Esta actuación se enmarca en nuestra estrategia de renaturalización de humedales y conservación de la biodiversidad”, señaló, evocando intervenciones emblemáticas como la restauración de la Laguna Primera de Palos o proyectos en las Marismas del Odiel y la Laguna de la Rábida.

Mañueco insistió en que la Laguna de las Madres “comparte un enorme potencial ecológico” y que su restauración “pone de relieve la importancia de trabajar de manera coordinada para que la sociedad conozca, valore y proteja estos ecosistemas, cuya riqueza merece una atención prioritaria”.

Un punto de partida para un futuro más verde

El protocolo ahora firmado no desarrolla actuaciones concretas, pero establece el marco jurídico y operativo que permitirá suscribir convenios específicos ajustados a la normativa vigente. Se trata, por tanto, de un punto de arranque que facilitará la puesta en marcha de proyectos destinados a preservar un enclave estratégico tanto para la biodiversidad onubense como para la Red Natura 2000 en Andalucía.

Un compromiso que, sobre el terreno, puede traducirse en mejores hábitats, mayor resiliencia frente al cambio climático y más oportunidades para la educación y la participación ambiental. En definitiva, un impulso necesario para que la Laguna de las Madres siga siendo un refugio de biodiversidad y un símbolo del patrimonio natural andaluz.